14 de febrero de 2009

Toca hoy reparto de rosas en Irun, en el mercadillo de la Plaza de Urdanibia. 11:00 horas, cinco concejales/as, dos candidatas al Parlamento Vasco y yo.

Son muchas rosas las que tenemos para repartir, pero no hay problema ya que nos las quitan de las manos. Saludo a mucha gente conocida que me dice: “¡esta vez sí podemos!” Hay un buen ambiente, pero como se suele decir, hace un buen día hasta que llega alguien que te lo amarga. En este caso se trata de una mujer de mediana edad que pasa por donde estamos repartiendo rosas, acompañada de un perro. Me increpa, nos increpa:

“Mucho dinero tenéis, y nosotros, sin poder votar”

Le respondo que será por algo, por lo que han ilegalizado, los tribunales, un par de candidaturas. Y añado: para nosotros este mes es el de los cementerios, el de los homenajes a compañeros asesinados.

Responde: “También nosotros tenemos muertos, y yo no soy una asesina”

Yo: ¿has condenado alguna vez los asesinatos?

Respuesta: “sois unos corruptos, los que más”, y sigue erre que erre con su cantinela.

Pregunto a los compañeros si la conocen me dicen que sí que es una borroka. Ella ha centrado sobre mí su ira, su mala leche, quizás porque era la cara más conocida, o porque tenía alguna cuenta pendiente conmigo relacionada con otros tiempos, de cuando yo estaba de Alcalde. Nunca se sabe. Su perro es mucho mas educado.

En fin, hay que seguir. Hemos terminado las rosas que teníamos que repartir en Irun. Nos pasamos por el bar de un amigo para tomar unos cafés y salimos hacia Hondarribia a seguir con las rosas. Aquí no hay mercadillo y es más complicado el reparto. Aun así van repartiéndose, poco a poco y a las 14:15 horas regreso a casa.

A las 20:00 horas tenemos concierto, el de S. Valentín, en el Centro Cultural Amaya, organizado por la Asociación Cultural Luis Mariano. Es un magnifico recital de la soprano donostiarra Elena Sancho, acompañada al piano por Gemma Beeson. Hora y media de buena música, para terminar bien el día.